...es solo una anécdota mas que contar.

Siempre que pasas por ese lugar avanzas despacio para observarlo con detenimiento, piensas que algún día tienes que venir con la tabla y catarlo, pero ese momento de calentura se olvida hasta que vuelves a parar en el mismo semáforo y avanzas despacio para mirarlo, de nuevo, al detalle.
Es el típico spot que todos tenemos al lado de casa, maravilloso y práctico si funciona y frustante si no es patinable.
En este caso me estoy refiriendo a la Plaza de José María Soler, al norte de Madrid justo frente al edificio de ING en el comienzo de la C/ Costa Rica. Es una plaza poco transitada pues no tiene nada de especial (Costa Rica repleta de coches en ambos costados). El suelo es de grandes planchas de granito bastante patinable, bien iluminado, y con bancos para hacer trucos, descansar o dejar los trastos. Toda la plaza está rodeada por unos planos inclinados de un metro de altura mas o menos, construidos con ladrillo visto y con una pequeña transición en su base. Parece perfecto, pues no lo es, por lo menos para mí. Los planos inclinados son mas bien planos verticales, donde un inexperto en estos menesteres, como yo, empeñado en meter sus ejes Carver C7 en los mayores apuros no tiene nada que hacer
Quizá para cualquiera de vosotros sea un lugar para disfrutar patinando, para mi, solo es una anécdota mas que contar.
A seguir quemando asfalto...